Una de las grandes revelaciones de 2019 es la de estos virtuosos jovenzuelos, BLACK MIDI: math-rock de alto voltaje y peligrosamente inflamable. Basta una primera escucha de "Schlagenheim" para comprender por qué el mismísimo Damo Suzuki (mítico ex vocalista de Can) eligió al cuarteto de Croydon liderado por las guitarras de Geordie Greep y Matt Kwasniewski-Kelvin como banda de apoyo en sus últimas performances.Alumnos aventajados de una exclusiva escuela musical londinense, Black Midi ha transformado su primera incursión en un estudio de grabación en una intensa "brainstorming", una avalancha de ideas, de sonidos tan intensos y penetrantes como una tormenta tropical.Este es un disco arriesgado e hiriente que exige plena atención del oyente, quien a pesar de poner todos sus sentidos en él se verá sorprendido porque las hostias, ¡que hay muchas!, le van a venir por todos lados. Los cambios de registro en una misma canción te llevan a territorios casi ignotos u olvidados. Magnífico