"Blue Lines" (1991) es una obra maestra, atemporal, icono de los 90. Un disco precursor e innovador por múltiples motivos.
Es el primer lanzamiento de "trip hop", el que definió la personalidad del "sonido Bristol" (impresionista, ecléctico, esteta y cinéfilo"); el que dotó a la música de baile de un carácter más intimista, reflexivo, menos hedonista, con ritmos ralentizados para la abstracción mental. Introdujo a la electrónica en el mercado de consumo masivo, especialmente en USA.
Es un libro de estilo por su buen gusto musical, por el uso del sampler, los sonidos pregrabados y las herramientas de producción.
Creó un género nuevo gracias a la fusión de otros ya existentes: dub, hip hop, electrónica, rare groove, reggae y soul de los 70 (William DeVaugh, es el autor de la versión "Be thankfull for what you've got")
Todo esto se gestó años antes en el seminal colectico "The Wild Bunch" (pioneros del sound-system en el Reino Unido).

