Pocos músicos en activo estos últimos 25 años siguen tan prolíficos y con el nivel creativo tan alto como Thom Yorke. Que hayan asumido tantos retos y riesgos, que se hayan regenerado con tanto ingenio y acierto. Y sin caer en la tentación mainstrem porque T.Y. afortudamente no sirve para ello. ¿Un artista que explota sus ansias y espíritu atormentado? Sí, y le sienta genial. Ahí está su obra para avalar una carrera ejemplar y sorprendente. THOM no para, hace 10 meses publicó la banda sonora "Suspiria", el remake dirigido por Luca Guadagnino del film clásico de terror, y hoy nos entrega en formato físico ANIMA. Compuesto por Thom Yorke y producido por Nigel Godrich, cuenta con 9 canciones oscuras e inquietantes (se pueden apreciar ecos de Autechre, Massive Attack, Vangelis o Tangerine Dream), que conservan el marchamo del autor en su faceta electrónica y experimental."Dawn Chorus" te pone la carne de gallina mientras sientes una agitación extraña y conmovedora en tus entrañas.